Tengo
una certeza
bastante
firme
y
no sé
por
qué motivo.
Nos
hemos
estado
buscando
y,
oye, da susto
encontrarse
así
de sopetón
después
de tanto
estar
vagando.
Así
me lo parece,
ahora
que te veo
tan
hermoso
y
se me inunda
el
pecho
de
aspirar
tanto Presente.
Esta
vez no me tiembles,
te lo pido
por favor,
porque
nos bordaremos
el
cuerpo entero
con
los ojos.
Seguro.
Y nos diremos
lo
innombrable
con
las manos.
Si
el susto
nos
da permiso,
y
lo aliviamos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario